Uno de los aspectos fundamentales a considerar en el contexto de las zonas francas en Chile y su reciente modernización es la supervisión de las prácticas de precios de transferencia entre empresas multinacionales operando en estas áreas.
En este ámbito TPC Group desempeña un papel crucial al ofrecer dicho apoyo asegurando que las empresas cumplan con las regulaciones de precios de transferencia de manera eficiente y conforme a los nuevos estándares impuestos por las reformas aduaneras chilenas.
En un impulso decisivo hacia el fomento del comercio y la expansión económica, Chile ha revisado su enfoque hacia las zonas francas, introduciendo cambios significativos que prometen transformar su panorama comercial internacional. Este 2024 se han implementado estrategias clave para modernizar estas áreas críticas, facilitando operaciones más ágiles y eficaces.
La innovación a través de la digitalización es la transición a la tramitación electrónica. Todas las operaciones de ingreso y salida de mercancías, así como los ajustes de inventario, ahora deben procesarse digitalmente. Esta medida afecta tanto a productos nacionales como internacionales y es un gran paso hacia la optimización de los tiempos de gestión en aduanas, asegurando procedimientos más rápidos y menos susceptibles a errores humanos.
Señala Carlos Vargas Alencastre, director general de TPC Group, que para participar en el ecosistema de zonas francas, ahora es esencial que los usuarios cumplan con estándares rigurosos muy específicos. Un ejemplo, la necesidad de que sean reconocidos oficialmente, que cuenten con una firma electrónica avanzada y mantengan una garantía vigente con el Servicio Nacional de Aduanas. La documentación relevante debe ser procesada electrónicamente de acuerdo con los estándares establecidos, lo cual es fundamental para mantener la integridad y seguridad de las transacciones.
Además, existe ahora un proceso de validación y transmisión de documentos que también ha sido fortalecido. Antes de ingresar al sistema aduanero, cada documento debe ser visado por la Sociedad Administradora, asegurando que la información sea precisa y completa. Este nivel de detalle es vital para la legalización de las operaciones y subraya el compromiso de Chile con un comercio exterior transparente y regulado, refiere Carlos Vargas.
Un aspecto revolucionario de estas reformas es la eliminación de los costos asociados a los trámites aduaneros realizados en el sistema del Servicio Nacional de Aduanas. Al remover las barreras económicas para los trámites, Chile incentiva a más empresas a operar dentro de las zonas francas, estimulando así el comercio y la inversión.
Las reformas implementadas en las zonas francas chilenas para el año 2024 representan un esfuerzo significativo por parte del gobierno para no solo simplificar las operaciones comerciales, sino también para aumentar la seguridad y la transparencia en las transacciones mediante regulación de los precios de transferencia. Con estas nuevas políticas, Chile se perfila como un competidor formidable en el escenario internacional, buscando atraer inversión y promover el crecimiento económico a través de sus zonas estratégicamente ubicadas.